jueves, 21 de agosto de 2014

Recargas “flash” en 15 segundos para autobuses eléctricos


Los autobuses eléctricos siguen su andadura, al igual que los coches, desarrollando nuevos sistemas de recarga para que en pocos años los veamos en las ciudades. Por el momento hay muy buenas ideas pero parece que hasta dentro de 4-5 años no veremos proyectos viables y reales.
Los autobuses eléctricos van a llegar a casi todas las ciudades importantes en los próximos años, al menos para los recorridos urbanos. El ahorro en combustible y la menor emisión de gases contaminantes serán los principales atractivos que verán los políticos en unos años. Pero todavía acecha el fantasma de las recargas, que en modelos con baterías tan grandes puede ser un gran problema.

Ya hemos visto varios sistemas, bien sea convirtiendo a los autobuses en tranvías, o con recargas parciales tanto en las paradas como en el trayecto. Ahora, y desde Suiza, nos llega un nuevo sistema que podría ofrecer recargas "flash" durante fragmentos de 15 segundos mientras los autobuses eléctricos están detenidos en una parada recogiendo o dejando a personas.
La capacidad de estos autobuses es de 133 personas.
En las líneas urbanas de casi todas las ciudades, las paradas están a muy poca distancia, por lo que recargas muy rápidas, pero suficientes para poder llegar a la siguiente parada y volver a cargar, podría ser un método válido para la movilidad sostenible en la ciudad. Según la Switzerland's Ecole Polytechnique Federale de Lausanne, la compañía que está liderando un grupo de empresas privadas y entidades públicas, ya están trabajando en un sistema de autobuses denominado TOSA.

Las baterías que emplearían estos autobuses eléctricos tendrían aproximadamente el doble de capacidad que la que equipan los vehículos eléctricos actuales y estarían instaladas en el techo, por lo que su coste sería muy reducido en comparación con un autobús eléctrico que solo se recarga al final del día o de la ruta.

Estos autobuses eléctricos se cargarían empleando un brazo robótico situado en la parada del autobús. Estos vehículos tendrían la batería cargada en un alto porcentaje por seguridad, y en cada parada que realizasen recuperarían lo gastado en llegar a ella desde la última. Estas recargas durarían 15 segundos y según los responsables, podría ser una realidad en 2017.


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